LATERAL ESTE GRADA BAJA

Un partido de fútbol no es solo un partido de futbol;

un partido de futbol es llevar al niño

como si te llevaras a ti mismo hace 30 años,
y no te hace falta ni siquiera estar atento a sus gestos

para saber lo que está pensando
igual que cuando vuelves a ver una pelicula que te ha gustado
y te fijas solo en lo que quieres y en los detalles de la historia
que la primera vez se te habian escapado, así que sonries
y te haces el distraído

cuando le escuchas preguntándote

las mismas cosas que preguntabas tú hace mas de 30 años,

y entonces recuerdas que te contestaban con indiferencia

pero con una extraña sonrisa

cómo diciendote que estés atento y
que descubras las cosas por ti mismo,

y abrías los ojos como platos

y veias las banderas inmensas según te ibas acercando al estadio

y los puestos de camisetas y bufandas con pipas y caramelos

y los helicópteros dando vueltas en el cielo
con toda esa gente caminando en procesión pero desordenados
y cuando te perdías un segundo tu viejo te tocaba la cabeza
apareciendo de la nada,
y al entrar escuchabas bocinas retumbando

por los pasillos y por las escaleras

y sonaba un petardo fuerte

y como todos sonreían tu también sonreias y no te asustabas

hasta que salías de los pasillos y veías el campo verde

iluminado

con el cesped cortado perfectamente y tan grande como no te imaginabas que algo
pudiera ser tan grande
y veias toda esa gente sentanda alrededor a los que se veía muy pequeños
como hormigas

y decías halaaaa, estában ahi todos dentro del estómago de esa ballena inmensa

de cemento

con sus enormes bocatas

y sus puros

y algunos se levantaban para dejarnos pasar

y tu padre saludaba al que tenía al lado

y se ponía a hablar con él

y te sorprendías cuando todos aplaudian a la vez

porque salian los jugadores del vestuario,

y tirabas del abrigo del viejo y decias mira

y se volvía a reir y te miraba muy dentro de tus ojos
como si no te sonriera a ti y sonriera a alguien que había dentro tuyo
que todavía tu no sabías ni que existia,

y cuando silbaba el arbitro empezaba el enorme aburrimiento,

¡¡¡¡que deporte tan coñazo el futbol!!!

pero es que un partido de futbol no es solo un partido

de futbol
y se lo digo mirando
dentro suyo a
ese tipo meláncolico que todos los niños tienen dentro
y que ellos todavía no saben ni que existe
que observa todo fijándolo en la memoria
alimentándose como un monstruo insaciable