sábado, 26 de enero de 2019

CUENTO DE INVIERNO



Entra por la ventana oro del universo con el angulo lateral de 
las 10 de la mañana
resaltando el polvo que hay encima de la pantalla del monitor apagado,
y parece la noche
estrellada
vista
desde una caravana de camellos cruzando un desierto,
y suena un pitido constante, pero no ese sonido futurista
de los coches de alta gama avisandote para que te pongas el 
cinturón mientras
cierras la puerta con contundencia y señalas el destino que tienes grabado
en el gps,
todo lo contrario,
suena un pitido acelardo de un coche metalico
que no necesita saber donde va, porque va siempre al mismo lado.
Siempre me han gustado
los sabores fuertes y elegantes como el de los vinos españoles 
los dramas de bergman y el coño de las mujeres,
de pequeño pensaba que olería como el plástico de
las revistas de moda y de lenceria, pero rasgar de rodillas unas medias negras
con pequeños puntitos blancos
es como rasgar el universo y ver detrás su origen hace millones de años,
salí de un coño, de la palabra mas bella que existe en todos los vocabularios,
sali de la palabra madre, salí cubierto de sangre gritando como una bestia y
nunca he dejado de gritar como la musica clásica
grita  junto a las imagenes de violencia, 
como el contrario de una misma idea grita
desde la osuciridad sin
que te des cuenta, 
o como la longitud de onda dorada de la luz del invierno cae
sobre el libro del maestro de la noche y de las tinieblas de boston que
tengo sobre la mesa y que no pienso devolver a la biblioteca.
Cuando salí a la calle me sabia la boca un poco a colutorio
y a flores y a mariposas de colores que llevaba tatuadas haciendo 
un cinturón ceñido a su cintura,
tenia un sabor de boca a culpa y cenicero con joyas incrustradas de oro 
y plata falsos,
sabor a marlboro y a labios pintados de rojo y a body cream
y me tomaba una cocacola mientras volvia a casa
y los árboles bailaban con el viento y en cada trago que daba 
miraba al cielo y
veía  las copas de los árboles, a las pequeñas y miles de hojas verdes bailando
mientras el sol pasaba entre ellas con fuertes brillos y me pegaba en la cara,
hice bien en venir en bicicleta mientras miro la inocencia de la ciudad en 
los parques cuando los niños se sueltan del brazo de su madre
cuando ya ha cruzado el semaforo
y salen disparados
escuchando a los otros niños que gritan su nombre desde lejos para
completar el equipo, y por detrás de todo va gritando la crueldad de la vida
con sus cuerdas vocales magicas en un tono casi impercetible,
y las madres se acercan entre ellas,
y los balones rebotan en la cancha
como pedradas en el tablero, y todos los tiros a puerta les salen desviados

lunes, 21 de enero de 2019

HISTORIA DE UNA CANCIÓN SOCIÓPATA

Miraba el plato de verduras
dándole vueltas con la cuchara tratando de darle la
forma que yo quería que tuviese,
pero esas verduras solo tenian forma de esfuerzo, de horarios y
de reglas, 
tenian forma de un duelo de honor, como si ese plato fuera un símbolo
de la normas de la vida, una especie de bautismo,
pero yo
me quedaba solo en una de las mesas rectangulares del comedor,
todas ya vacias, con las camareras recogiendo las últimas bandejas metalicas
exagerando el ruido para que me lo comiera y me fuera de una vez,
como si eso solo fuera un plato de verduras,
aquella situación era demasiado bonita, un duelo bajo las luces
fluorescentes del comedor con la banda sonora del ruido de las bandejas y 
los consejos y el tiempo del recreo acabándose sonando de fondo,
todos se habian ido a jugar,
los que se lo comian encantados, los que se lo tomaban a risa,
y los que lloraban pero al final se lo comian,
pero yo me quedaba ahí castigado hasta que me lo comiera,
con el plato cada vez mas frio
la profesora cada vez con mas mala leche,
sigo resistiendo todavia al duelo con la vida, me ha dicho con ese 
honor absurdo y chulesco de quien se cree superior pero tiene miedo
que elija hora, lugar y armas, para ver si me hecho atrás,
yo la he dicho que todos los días, que papel en blanco,  y que
rimas, ahi puedo seguir haciendo esas mismas canciones y resistir
como resiste la música de los tiovivos que aún quedan en las plazas de
algunos parques, 
con esas figuras avanzando en círculo y de
arriba abajo;
naves espaciales que disparan hacia  la nada rayos lasers de
esos de las canciones techo, 
con leones, cisnes y pequeñas
jirafas alternativas de malasaña de piel blanca y
flequillo recortado, 
que se saben de memoria las letras de la himnos
indie que gritan dando saltos en los conciertos 
y en los festivales de verano,
resisto como resiste
la habitación de la vecina escuchando música con los
cascos y con la luz del flexo encendida entre el silencio y
la osucridad de la noche y entre las casas naranjas
todas iguales de mi barrio, resisto contra las simetrias de las
ideas formando cuadrados
cuando se cruzan unas con otras y dejan de llamarse
como se llaman 
y cambian su nombre, 
los griegos se equivocaban, el olimpo no tiene forma de religión,
resito como resiten 
las melodias de los anuncios de clases particulares de piano
pegadas a los semáforos en las aceras mas ruidosas
y dejando los finales de
las canciones abiertas para que
después venga otra y nunca mueran, como hacen las ideas y las reglas
para seguir sobreviendo por ecnima de nuestras cabezas



lunes, 14 de enero de 2019

PRÓLOGO


Cuando sonó el despertador
las columnas que soportaban las estructuras de los sueños aún continuaban
en pie, una ciudad de mármol blanco entera se alzaba alrededor de la cima
de una colina y los muertos aún estaban vivos y daban discursos apocalpiticos en
sus calles,
pero sus ciudadanos se reían y los ignoraban porque los profetas
no son bienvenidos ni siquiera en los sueños, y solo querían seguir
comprando paz y sexo entre la muchedubre de los mercados, hasta que
ya fué demasiado tarde para ellos,
tu aún no habias despertado, y la osucridad hacia que tu piel tuviera el mismo color
que los armarios y que el suelo y que todas las cosas del universo,
como si estuvierais hechos de los mismo,
y aun desprendías calor como
cuando la tierra se estaba formando y todo era oscuridad y
fuego,  y aún respirabas  como un animal tranquilo como cuando todavia no
existían las palabras, 
todo parecía el inicio de un gran cuento,
me gustan los introducciones en las que el narrador le explica directamente al espectador
casi con un  metodo científico, el contexto entero, el espacio y la psicología de
lo que se va a ver a continuación, pero sin ser el prologo, sino ya formando parte
de la narración,
me encanta por ejemplo el inicio del corazón delator
“¡Es  verdad!  Soy  nervioso,  terriblemente  nervioso.  Siempre  lo  he  sido  y  lo  soy.  pero, 
¿podría  decirse  que  estoy  loco? 
y ya estas dentro de la psicología del personaje, de la obra, y de todo el estilo en apenas unas
pocas palabras,
o el inico de la sinfonia Praga , poooooom…. y luego un corto silencio con la
forma de un gran vacio,  
y después otra vez popopom, la misma duración que el anterior poooom
pero recortado en su interior,
y entonces ya sabes que lo que vas a escuchar es
algo que va a jugar con las  simetrias del universo y con las tuyas
entrelazándolas al mismo tiempo, y ya sabes que no servirá de nada
intentar controlarte,  ni manterte al margen, ni hacer un esfuerzo por tener los pies
en la tierra,  solo dejarte llevar por algo grave y elegante, a no ser
que estés acompañado y veas a alguno moviendo un pie o la cabeza
estropeándolo todo,
no me dicen tanto los finales de los cuentos o de las personas, y pronto
los olvido,
por eso no me dice nada el simbolo de la cruz, eso es para quienes se sienten
atraídos por los finales apoteósicos
o dramáticos y para quienes necesitan una verdad y un final para no
sentirse perdidos,
sin saber que en los inicos es donde esta
la esencia de la historia, y la clave de todo,
por eso yo llevo la soledad de un desierto como simbolo
colgada del cuello,
en los desiertos es donde empieza todo, ya sea en la tierra o en el universo,
no me interesan los finales ni las despedidas marcadas,
por eso me gusta el incio del quijote,
es una introducción milagrosa, un don que tienen algunas frases de transferir
mas información de la que fisicamente puedan abarcar,
y sin que te des cuenta te dice que quien va a contar la historia ya
no está en ese lugar, pero que estuvo mucho tiempo,
un sitio de cuyo nombre no quiere acordarse,
le está hablando directamente al tipo de persona que está huyendo de algo,
y esos son todas las personas del mundo.

TRIATLON

  BAILAR   BIENVENIDA 3 Anoche debí soñar algo magnífico que desatascó el pensamiento algo como una fórmula matemática que resuelve ...