El olimpo 3, 8ºA

hoy llueve
la ciudad está gris,
es un buen dia para hablar con los dioses;
a los dioses les gusta esperar en los semáforos
con las piernas cruzadas
con sus tacones y unas medias
bajo el paraguas,
los dioses mienten contra viento y marea
dicen que ellos no han sido los que han mordido
el pan de camino a casa,
los dioses han ganado roland garros
10 veces
tumbando a la tecnica y al talento con cojones y con esfuerzo,
los dioses siempre tienen las uñas afiladas
y no se fian de las personas aunque les den todo tipo de cuidados
y les construyan enormes estatuas junto al nilo,
los dioses vienen detrás de las repeticiones
detrás del insistente golpe del martillo
detrás de la obsesión
y solo aparecen cuando no puedes pensar en otra cosa y
ya has perdido el control,
los dioses necesitan olvidarse de si mismos
estar en movimiento
avanzar
tropezar
y no les gustan los rios tranquilos,
se sienten atrapados
prefieren los rápidos
domar a la bestia
o morir ahogados, les encanta ir a favor de la corriente
pero flotan sobre ella como una tabla de madera,
los dioses tocan un ritmo personal
y no les importa nada si lo bailan o les gusta a los demás,
a los dioses les atrae lo que a ellos les falta
lo contrario a lo que son ellos
y lo ven en cualquier cosa
en todos los lados y en cualquier persona,
los dioses no aman
los dioses admiran
los dioses tienes alas y cada cierto tiempo las usan para marcharse
aunque ellos no se quieran ir, los dioses nunca se van del todo
no les gustan las despedidas
se convierten en leyenda o en fantasmas por los sueños,
los dioses son inmortales
hasta que les llega la hora,
los dioses guardan silencio en las montañas
y gritan como locos en la soledad,
los dioses hacen magia pero no creen en ella,
a los dioses les gusta la realidad pero no la verdad
los dioses esperan la llamada del camello para alargar la noche
los dioses vigilan la ciudad por las ventanas los dias que llueve